Fernando Perén Miza tenía 35 años cuando fue ejecutado y desaparecido de la ciudad de Guatemala, en 1984. Fernando vendía dulces típicos, roscas y manías en la capital. Era un hombre bien trabajador. Hizo dos años de servicio en el Ejército, antes de que comenzara la violencia. Era un esposo muy responsable, cariñoso y muy humilde. Algunos de sus vecinos le dijeron a la familia que el Ejército fue a la casa y mató a Fernando y a su esposa Fabiana. Los soldados tomaron a sus dos niños pequeños y nadie sabe lo que les sucedió. Hubo muchas víctimas en la familia de Fernando: su esposa Fabiana; sus tres hermanos, Julián, Ambrocio y Gabriel; su padre Sotero y los dos hijos de quienes nadie sabe nada. "Siempre los recordaremos. Tenemos la esperanza de que algún día nos encontremos en la muerte".
THE HUMAN ELEMENT PROJECT - EL ELEMENTO HUMANO
Víctimas y familiares de víctimas ofrecieron su testimonio y elaboraron piezas artísticas en homenaje a sus seres queridos desaparecidos o ejecutados durante el conflicto armado interno en Guatemala. Las obras fueron realizadas en 2016, en talleres facilitados por integrantes del Proyecto El Elemento Humano (The Human Element Project), con la colaboración de la Coordinadora Nacional de Viudas de Guatemala -CONAVIGUA-, la Fundación de Antropología Forense de Guatemala y otras organizaciones de víctimas y familiares que, décadas después, siguen buscando y honrando a sus seres queridos.
Puedes ver parte del proceso en:
Reconstructing Memories with the families of the Guatemalan Genocide